No dejo de mencionar que cada vez que me siento a mirar TV siento algo de vergüenza ajena.
A pesar de que los directivos de las agencias de publicidad mexicanas siguen afirmando que el trabajo de los creativos mexicanos va mejorando hasta llegar a niveles de primer mundo, es obvio que la pantalla dice lo contrario. Aún estamos llenos de anuncios tímidos y muy coservadores y poco arriesgados; muchos de ellos aún con la fórmula procteriana del siglo pasado en donde se limitan a utilizar un copy informativo y mandatorio: "compre", "use", "pruebe"; algunos más utilizando fórmulas aparentemente sutiles para enamorar a los consumidores, pero que en la realidad es que no siempre se logra el objetivo deseado (sí es que acaso tienen algún objetivo).
¿Qué querrán decirnos con aquello de "¡Hemenegildo, traéme un X-L qué!!!? ¿¡Y, quién demonios es Hermenegildo!? ¿ó refrescos Pascual preguntando si queremos comernos una carnita tampiqueña? O peor aún, ¿que diablos tiene que ver la lata más famosa de México con las luchas?
Sin duda alguna, ninguno de esos comerciales tiende a despertar los verdaderos deseos del consumidor, y que no siempre tienen que ver precisamente de "comprar", "usar" o "probar" el producto.
Habrá quienes me digan que hay destellos de creatividad, y yo mismo digo que me parece muy memorable la campaña de la Secretaría de Hacienda que me dice "es bueno declarar, pero hacerlo a tiempo es mejor"; aunque no se si el mensaje realmente me motive a presentar mi declaración de impuestos.
Muchos más mencionarán: ¿Y que pasa con los excelentes anuncios como los de axe y coca-cola? Tristemente debo confesar que los autores creativos no son precisamente mexicanos. Y es ahí donde pongo el dedo en la llaga ¿Qué pasa con la publicidad mexicana? ¿Acaso los mexicanos no somos creativos verdaderamente?
Yo tengo una posible respuesta para ello ¿Ustedes que opinina?